El programa Oaxaca Brilla se inauguró con la iluminación del primer monumento de 10 que usa una tecnología más eficiente y reduce el consumo de electricidad.

La imagen de un Cristo crucificado llegó a Oaxaca después de algunos contratiempos. Era mitad del siglo XVI y la segunda vez que se enviaba esta figura a México, luego del decomiso de la primera por los pobladores que la recibieron en el puerto de Coatzacoalcos.

La nueva pieza se ubicó entonces en Antequera, nombre anterior de la ciudad de Oaxaca, en una catedral construida con paredes de adobe y techos de zacate que en una tormenta fueron consumidos por el fuego de un rayo, en el que solo quedó de pie dicho Cristo crucificado. Al considerarlo un milagro, el pueblo lo nombró el Señor del Rayo y este es venerado anualmente el 23 de octubre en la Catedral Metropolitana de Oaxaca, una iglesia barroca construida con una roca volcánica de tonalidades verdosas que en México conocen como cantera.

Es domingo y faltan 10 días para esta festividad, pero como buenos católicos, en la parroquia ya comenzó la celebración del Señor del Rayo. La gente se aglomera en la plaza central porque se espera, además, que la catedral sea completamente iluminada con luces LED desde el exterior, gracias al programa Oaxaca Brilla de Iberdrola México en colaboración con el Gobierno de Oaxaca.

Tras un conteo regresivo al caer la noche, se enciende la nueva iluminación y los presentes ven “renacer” la catedral ante sus ojos.

El antiguo sistema, instalado en el propio inmueble, fue retirado y sustituido por proyectores que dirigen la luz con gran precisión para destacar los elementos arquitectónicos más significativos de este monumento que empezó a ser construido en 1535.

Ahora, la Catedral Metropolitana de Oaxaca cuenta con un sistema que no solo realza su valor histórico, sino que también es sostenible y respetuoso con el medio ambiente porque aporta una gran eficiencia energética.

Con Oaxaca Brilla, además de este templo se colocará tecnología de vanguardia en otros edificios emblemáticos del casco histórico de la capital estatal, para que sus pobladores y sus más de 1,3 millones de visitantes al año admiren sus emblemáticos monumentos.

“Oaxaca Brilla consiste en la iluminación de 10 edificios históricos en un plazo de cinco años que son parte de la herencia cultural de la ciudad. El proyecto tiene numerosos beneficios porque, además de embellecer los monumentos, reduce la huella de carbono al disminuir el consumo eléctrico y también atraerá más turistas”, dice Alicia Valcarce, directora de la Fundación Iberdrola México, que coordina el proyecto en colaboración con el Gobierno estatal y municipal, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y el proveedor técnico de esta iniciativa social, la compañía especializada en iluminación artística Varona.

Con una inversión de un millón de dólares en un plazo de cinco años, la compañía energética iluminó ya la Catedral Metropolitana y continuará con los templos de Santo Domingo de Guzmán, San Matías de Jalatlaco, San Felipe Neri, la Preciosa Sangre de Cristo, la Compañía de Jesús y San Agustín, así como la Basílica de la Virgen de la Soledad, el Teatro Macedonio Alcalá y el Palacio de Gobierno de Oaxaca, todos dentro del centro histórico, declarado Patrimonio Mundial por la Unesco en 1987.

Roberto Lurueña, director de la empresa Varona, dedicada a la iluminación de monumentos históricos en todo el mundo, desde Egipto a España, ha trabajado durante meses en el proyecto de la Catedral Metropolitana de Nuestra Señora de la Asunción, que hoy cuenta con 72 proyectores LED que resaltan cada detalle de las representaciones religiosas del edificio.

“Había muchísimos focos y luces en la propia fachada de la catedral que estaban afectando el edificio. Lo primero que hicimos fue retirar todo con mucho cuidado, con técnicas de restauración, para quitar todos los cables y los focos que había”, describe mientras señala hacia el templo. “Ahora se ha hecho una iluminación desde fuera. Nos hemos apoyado en los báculos y en las farolas que había alrededor de la catedral para instalar proyectores LED”, añade.

Lurueña también explica que esta instalación se hizo con proyectores LED de última generación, los de mayor eficiencia energética que hay en el mercado, que en conjunto representan una potencia instalada de 3,400 vatios y una reducción del 70 % en el consumo eléctrico de la catedral.

“Esta tecnología, además de ser muy eficiente, permite proyectar el haz de luz de manera muy precisa, entonces hemos ido iluminando todas las esculturas y los elementos arquitectónicos de la fachada sin que se escape nada de luz al ambiente, por lo cual reducimos la contaminación lumínica”, agrega Lurueña.

Además, Varona instaló un reloj astronómico que activará los focos LED cuando caiga la noche y los apagará cuando salga el sol.

En el evento participó el gobernador de Oaxaca, Salomón Jara Cruz, quien destacó la importancia de estos proyectos culturales. “Transformar la ciudad de Oaxaca es iluminarla y realzar el esplendor de sus edificios históricos […] Se trata de preservar la esencia y el valor histórico de los monumentos, resaltando su belleza arquitectónica con iluminación artística y técnicas de vanguardia”.

Destacó que Oaxaca Brilla es un programa de la iniciativa público-privada Amigos por Oaxaca, impulsada en septiembre de 2023 junto con el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) para promover el desarrollo económico de la entidad.

Es la primera vez que Fundación Iberdrola realiza este programa en México, pero se suma al programa global de iluminación artística que tiene el grupo desde 2009, que suma más de 50 edificios históricos intervenidos.

Empezar en México por el encendido de un templo donde se venera el Señor del Rayo le da un toque de simbolismo a esta noche oaxaqueña. La catedral hoy está más brillante que nunca.

CON INFORMACIÓN DE EDUARDO LUIS HERNÁNDEZ PARA “EL PAÍS”.