
El expresidente Ernesto Zedillo ha propuesto realizar auditorías internacionales independientes a las principales obras de infraestructura del sexenio de Andrés Manuel López Obrador, como la refinería de Dos Bocas, el Tren Maya y la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM). Zedillo argumenta que estas auditorías son necesarias para evaluar los costos, beneficios y posibles irregularidades de dichos proyectos .
La presidenta Claudia Sheinbaum ha rechazado esta propuesta, señalando que Zedillo carece de autoridad moral para exigir transparencia, debido a su papel en el rescate bancario conocido como Fobaproa durante su mandato. Sheinbaum ha calificado el Fobaproa como una decisión discrecional y opaca que convirtió deudas privadas en deuda pública, la cual los mexicanos continúan pagando .
En respuesta, Zedillo ha defendido el Fobaproa, afirmando que fue auditado por entidades internacionales y que evitó un colapso financiero mayor. Además, ha acusado a Sheinbaum de recurrir a descalificaciones personales en lugar de responder con argumentos a sus críticas sobre la reforma judicial y la gestión de las megaobras .
El enfrentamiento entre Zedillo y Sheinbaum ha reavivado debates sobre la transparencia y la rendición de cuentas en proyectos gubernamentales, así como sobre las decisiones económicas tomadas en el pasado. Mientras Zedillo insiste en la necesidad de auditorías independientes, Sheinbaum enfatiza la importancia de recordar y aprender de los errores del pasado para evitar repetirlos.
Este intercambio refleja las tensiones políticas actuales en México y la continua discusión sobre cómo garantizar la transparencia y la responsabilidad en la administración pública.