Petróleos Mexicanos (Pemex) confirmó afectaciones en la oferta de gas licuado de petróleo (LP) en Oaxaca, atribuidas a complicaciones logísticas y condiciones climáticas adversas en la refinería de Salina Cruz, pero descartó un desabasto generalizado. Según la empresa, desde el 7 de diciembre se han restablecido operaciones y el suministro en puntos clave como Tierra Blanca y Pajaritos.
Sin embargo, gaseras locales reportan retrasos en la distribución, lo que ha generado preocupación en regiones como los Valles Centrales, la Mixteca y la Costa. En algunos casos, se han registrado incrementos en los precios de hasta 40 pesos por tanque debido a la escasez y filas en los puntos de venta. Empresas como Gas de Oaxaca y Flama Azul han pedido a los clientes programar sus pedidos con anticipación para evitar compras de pánico.
El problema pone de relieve las limitaciones logísticas de Pemex en la región, mientras usuarios y distribuidores esperan una solución definitiva a la situación en los próximos días