Rigoberto Martínez, reconocido por su labor con los equipos de baloncesto de los niños triquis, quienes alcanzaron fama internacional en 2010, fue despedido en un emotivo sepelio en su tierra natal, Santa Cruz Río Venado, en Constancia del Rosario, Mixteca de Oaxaca, tras haber sido asesinado el lunes en la Escuela Normal de Putla Villa de Guerrero.
Familiares, estudiantes, amigos y la comunidad en general se reunieron en su honor en un acto cargado de sentimientos, con llanto, exigencias de justicia y música de mariachi. Las ceremonias comenzaron a las 11:00 de la mañana con un homenaje de cuerpo presente en la escuela primaria bilingüe local.
Durante el día, se llevaron a cabo diversas actividades, incluyendo una misa y, finalmente, la inhumación de Rigoberto pasada las 4:00 de la tarde. En el homenaje, familiares, colegas, y estudiantes de los equipos que él entrenó se acercaron al féretro, realizando guardias de honor como muestra de respeto. Uno de los momentos más emotivos fue cuando los familiares colocaron un balón de baloncesto sobre el ataúd, junto a una cruz, mientras los asistentes lloraban.
El féretro fue colocado en la cancha de baloncesto de la escuela, y después, escoltado por la Banda de Guerra, se trasladó al templo católico, a pocos minutos del mediodía. En la entrada del templo, familiares y amigos pudieron despedirse una vez más de Rigoberto, impulsor de los equipos de niños triquis que ganaron notoriedad internacional por su talento y su característico juego descalzo.
Acompañados por un mariachi que interpretó canciones como “El Rey”, “Te vas ángel mío” y “Cruz de Madera”, familiares y amigos expresaron sus condolencias a la familia. Los jóvenes deportistas que Rigoberto entrenó lloraron durante la ceremonia, reflejando el impacto de su pérdida.
Alrededor de las 12:20, el párroco invitó a los asistentes a la misa en el templo, y, una hora después, el féretro fue nuevamente colocado frente a la iglesia, donde se realizaron más guardias de honor en homenaje al maestro y entrenador. Una camiseta de la academia Rigos, fundada por Martínez, fue colocada sobre el ataúd en señal de respeto.
De regreso en la escuela primaria, el féretro permaneció algunos minutos más, mientras jóvenes basquetbolistas botaban balones en su honor al avanzar por las calles, acompañados de cohetes y música de viento.
Antes de las 3:00 de la tarde, el cortejo partió hacia el cementerio, donde se hizo una última pausa para dar una despedida final. Cerca de las 3:30 de la tarde, Rigoberto Martínez fue sepultado en una ceremonia que duró unos 40 minutos.
¿Cómo sucedió el ataque?
La noche del lunes, Rigoberto fue asesinado tras salir de una práctica vespertina en la Normal de Putla Villa de Guerrero, Constancia del Rosario, su lugar de origen. Según las autoridades, fue sorprendido por tres individuos cuando intentaba subir a su vehículo. Rigoberto trató de resguardarse en las instalaciones educativas, pero fue alcanzado y asesinado.