Familias, amigos y compañeros de trabajo, marcharon en la ciudad de Oaxaca para exigir a las autoridades del gobierno y de la Fiscalía General del Estado, aceleren las investigaciones e intensifiquen las labores de búsqueda de la joven Judith Vianney Toledo Santos, desaparecida desde el pasado 22 de octubre de 2024.
Judith Santos Mendoza, madre de la joven desaparecida, denunció que su hija fue última vez la mañana del 22 de octubre en el Hospital Regional del ISSSTE, cuando terminó su jornada laboral a las 7:36 horas, cuando reportó su salida en el reloj checador.
Las imágenes de las cámaras de vigilancia del hospital muestran a Vianney Toledo salir y dar vuelta en una calle, y desde entonces se le perdió el rastro.
Hasta el momento, aseguró, la Fiscalía General del Estado no ha obtenido la sábana de llamadas del celular de Vianney Toledo para saber cuáles fueron las últimas personas con las que ellas tuvo comunicación, y conocer o localizar las zonas en las que se encontró su teléfono celular. También, a cinco días de su desaparición, no se ha tenido acceso a las cámaras del C4 que se encuentran en la zona y que podrían arrojar luz sobre su desaparición.
“En esa parte (en la investigación) si me han apoyado, pero siento que están muy lento, a mí me urge ver la sábana, ahí está el último contacto de Vianney, es lo más importante, siento yo. Siento que en esa parte se están tardando mucho”, dijo.
Vianney Toledo recientemente se graduó como enfermera, tiene dos hijas de cuatro y ocho años de edad. En octubre consiguió trabajo en el Hospital Regional del ISSSTE como enfermera eventual para cubrir un interinato.
Su madre dijo que se están investigando a dos ex parejas de Vianney Toledo, que de acuerdo con sus amigas, ejercían algún tipo de violencia contra ella porque eran celosos y posesivos; pero hasta el momento, no hay más indicios que permitan localizarla.
“La exigencia es que se apuren, que sea más rápida, que no se tarden en buscar a mi hija, siento que es un día es mucho, hoy es otro día, otra noche, ayer nos dijeron que iban en un autobús, nos trasladamos como locos a la central de abastos, pero no era ella”.
La marcha partió de la fuente de las Ocho Regiones en la ciudad de Oaxaca, arribó al zócalo capitalino donde protestaron por unos minutos frente al palacio de gobierno y posteriormente continúo hacia la Fiscalía General del Estado, en sus oficinas que se encuentran en el centro de la ciudad.