Francia será anfitrión de los Juegos Olímpicos más igualitarios de la historia. Con igualdad de género entre los atletas participantes, la primera guardería en la Villa Olímpica y más mujeres como comentaristas. Pese a estos avances, los retos para la igualdad de género en el deporte persisten.
En 1912 el fundador y líder de los Juegos Olímpicos modernos, Pierre de Coubertin, decía que tener mujeres en esta competencia era “poco práctico, poco interesante e inapropiado”. La lucha de las mujeres, quienes incluso han alcanzado la perfección en sus actuaciones olímpicas, ha demostrado lo contrario.
Hace 100 años, en la misma sede: París, menos del 5% de los atletas participantes eran mujeres. En esta edición ellas representarán al 50% de los participantes.
En la edición 2024 de la justa más grande deportiva, no sólo se vivirán los primeros Juegos Olímpicos con igual participación de hombres y mujeres, sino que las medidas con perspectiva de género se han profundizado.
La Comisión de Atletas del Comité Olímpico Internacional ha confirmado la presencia de guarderías y salas de maternidad en la Villa Olímpica para que los atletas que son madres o padres puedan estar cerca de sus hijos durante las competencias.
Ésta —la edición 2024— también es la primera en la que se impulsan estas iniciativas.
¿Cómo funcionará la guardería?
La existencia de la primera guardería dentro de la Villa Olímpica refleja un gran avance para la inclusión. En este espacio, patrocinado por la línea Pampers de P&G, los y las atletas podrán acceder a productos de cuidado para bebés y niños.
Este espacio se ubicará en la zona no residencial de la Villa Olímpica y dará servicio de las 9:00 a las 21:00 horas. La guardería estará equipada para brindar servicios de cuidados durante todas las competencias de los Juegos Olímpicos y los Juegos Paralímpicos.
¿Por qué importa?
Tener hijos y ser atleta en los Juegos Olímpicos parecen tareas excluyentes, pero no lo son. Allyson Felix, la multimedallista de atletismo estadounidense luchó por demostrar que no es así y que la maternidad y paternidad pueden ser aliados del deporte de alto rendimiento.
Durante su carrera e incluso desde su retiro, que anunció en 2022, Felix ha visibilizado la necesidad de garantizar espacios seguros, igualitarios e incluyentes para las atletas que son madres.
Más allá de la existencia de la primera guardería en los Juegos Olímpicos, el reconocimiento de la crianza como parte de la vida de los atletas es fundamental en la lucha por la igualdad de género.
Por un lado, contribuye a erradicar la idea de que ser madre es el fin de la carrera deportiva de las mujeres. Por otro lado, incentiva la participación de los hombres que son atletas en la crianza de sus hijos e hijas.
“El embarazo y la maternidad no tienen por qué significar el fin de la carrera para las atletas mujeres (…) Es muy útil tanto para los padres como para los bebés poder pasar tiempo juntos, especialmente en un momento tan importante de la vida deportiva de un atleta. Esta guardería permite que eso suceda, a la vez que da a los atletas la oportunidad de centrarse en los Juegos”, afirmó Emma Terho, presidenta de la Comisión de Atletas del COI.
Lo que queda por resolver
Las mujeres han luchado colectivamente y desde diversas trincheras por tener un lugar, visibilidad y reconocimiento en el mundo del deporte —que hasta hace no mucho estaba reservado para los hombres —.
Gracias a esa lucha incesable hoy las mujeres atletas viven en mejores condiciones y espacios más seguros. Pese a estos importantes avances, todavía hay retos para alcanzar la igualdad sustantiva de género en el mundo del deporte.
La brecha salarial, la baja representación femenina en el mundo de entrenadores y una menor cobertura por parte de los medios de comunicación, por mencionar algunos.
Con algunas excepciones, en todas las disciplinas que se presentan en los Juegos Olímpicos las mujeres reciben menor pago que sus pares hombres y tienen también menos patrocinios. Entre los 100 atletas mejores pagados del mundo no hay ni una sola mujer, de acuerdo con la lista de Forbes para 2024.
Por otro lado, se estima que las entrenadoras de atletas en esta edición de los Juegos Olímpicos representen cerca del 25 por ciento. Este nivel implica que de cada cuatro coaches, al menos tres son hombres. Mientras no haya mujeres liderando equipos y atletas, no habrá igualdad.
Otro de los grandes retos es el de la cobertura desigual de los deportes en los medios de comunicación masiva. Aunque cada vez más gente sintoniza los eventos deportivos de mujeres, las televisoras, radios, revistas y periódicos siguen priorizando la cobertura de los eventos deportivos masculinos.
Según datos de la ONU Mujeres, 7 de cada 10 personas en el mundo ven deportes femeninos, pero éstos representan apenas el 20% de la cobertura mediática global.
Aunque el avance en materia de género ha sido lento en el mundo del deporte, las mujeres continúan haciendo historia en cada nueva edición de los Juegos Olímpicos. En esta edición serán 5,250 mujeres, las mejores del mundo, las que competirán en alguno de los 32 deportes.