Dos niños que vendían dulces en la vía pública fueron detenidos por al menos una decena de elementos de la Policía Municipal de Oaxaca de Juárez, mientras un transeúnte grababa el abuso de autoridad de los uniformados, el 6 de abril pasado.

El video viral de 26 segundos muestra cómo los elementos bajan de una patrulla rotulada con el número 195. Al fondo se escucha el llanto de uno de los niños, quien es subido a la batea de la unidad oficial, donde viajaba otra persona detenida.

Después se supo que ambos niños venden marquesitas en las calles de la ciudad; por su caso, la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO) inició el expediente DDHPO/0570/(01)/OAX/2022.

Además, solicitó un informe sobre los criterios de la detención de los niños, su situación jurídica, las medidas que se aplicaron para la protección de sus derechos e instruyó a la fiscalía para investigar el hecho.

La detención de los dos niños es uno de los 21 casos de quejas contra la policía de la capital del estado que la Defensoría de  los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca ha documentado en 2022.

Entre 2020 y lo que va de este año, la defensoría notificó la existencia de 474 expedientes de queja contra policías municipales del estado. Del total, 69 corresponden a 2022; 159 a 2021 y 246 a 2020.

Del 1 de enero al 3 de agosto de 2022, la policía de Oaxaca de Juárez ocupa el primer lugar de quejas, con 21; seguido de Santa Cruz Xoxocotlán, con 10 y Santa Lucía del Camino, con siete. 

En primer lugar se señalan quejas por falta o deficiencia en la fundamentación o motivación de los actos de autoridad con 26 casos; detención arbitraria con 23 casos e incumplimiento de una obligación o deber constitucional con siete.

La seguridad de la ciudad de Oaxaca también ocupó el primer lugar en quejas iniciadas durante 2020 y 2021, de acuerdo con la DDHPO, con nueve y 29 expedientes, respectivamente.

Sobre el tema, la regidora de Seguridad Ciudadana y Movilidad y de Agencias y Colonias de Oaxaca de Juárez, Claudia Tapia Nolasco, reconoce que la falta de capacitación de las corporaciones de seguridad en derechos humanos es una omisión histórica del municipio.

En entrevista con EL UNIVERSAL, señala que continuamente reciben quejas ciudadanas cuando hay aprehensiones, debido a los procedimientos que los elementos aplican.

“A mí me ha tocado estar del otro lado y he podido constatar los abusos de autoridad, por eso nos cuestionamos qué podíamos hacer para que las cosas cambien”, indica.

Por esa razón, apunta, se reunió con el presidente municipal de Oaxaca de Juárez, Francisco Martínez Neri, y el titular de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, Vialidad y Protección Civil del municipio, Raúl Ávila Ibarra, con quienes planeó un taller en Derechos Humanos dirigido a los policías, que dio inicio el 10 de agosto pasado.  

La regidora precisa que ésta es la primera ocasión en la que un ayuntamiento promueve la capacitación de sus elementos de seguridad en derechos humanos; para ello, la DDHPO hizo un diagnóstico previo a la formación de mil 085 policías.

Entre las deficiencias encontradas en el diagnóstico están los temas de derechos de mujeres; niños, niñas y adolescentes y de seguridad pública; así como derechos y obligaciones de  las y los servidores, a fin de delimitar el margen de actuación.

La regidora resalta que a la par de la falta de capacitación en Derechos Humanos, en Oaxaca de Juárez no hay suficientes uniformados, mientras que los que forman parte de la corporación no están debidamente capacitados en general.

No obstante, de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en el Modelo Óptimo de la Función Policial se establece un estándar mínimo de 1.8 policías por mil habitantes; mientras que en la capital hay 4 por cada mil personas.

Foto: Edwin Hernández

A la deficiencia de elementos se suma el déficit de más de 300 millones de pesos con el que fue recibido el municipio, lo que obstaculiza acciones como nuevas prestaciones o  presupuestos, subraya la regidora. 

No obstante, afirma que para garantizar la seguridad de la población se debe cambiar el filtro de contrataciones, para encontrar elementos con el perfil necesario y brindarle herramientas para un mejor desempeño.

«Se están realizando cambios graduales. Se busca generar confianza en la policía, porque los elementos no generan confianza. La estrategia no son sólo mejores condiciones laborales, sino también un mejor trato para las y los elementos”.